Al menos 820 personas murieron y otras 672 resultaron heridas, en diferentes localidades marroquíes a causa del terremoto de magnitud 7 ocurrido en la noche del viernes con epicentro a 60 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech, a las 7,00 hora local. En las horas posteriores al terremoto de 6,9 también ha habido réplicas de hasta 5,2 grados.
En un comunicado, el Ministerio de Interior indica que 290 personas murieron en la provincia de Al Haouz, -al sur de Marrakech y cercana al epicentro-, otros 190 en Taroudant, 89 más en Chichaoua, 30 en Ouarzazate, 13 en Marrakech, 11 en Azilal, 5 en Agadir, 3 en Casablanca y 1 en Al Youssoufia.
Los heridos, de diversa gravedad, fueron trasladados a centros hospitalarios, indica el ministerio, que añade que también hubo daños materiales en zonas no habitadas. Según Interior, que llama a los ciudadanos a mantener la calma, se han movilizado fuerzas de seguridad y protección civil de todas las prefecturas provincias afectadas, así como los medios necesarios para intervenir y evaluar los daños.
En redes sociales, los marroquíes han compartido numerosas fotos y vídeos en los que se ven edificios dañados y caídos, algunos con personas heridas o aparentemente muertas entre los escombros. Varios edificios de la medina (ciudad antigua) de Marrakech resultaron dañados a causa del terremoto.
Según un boletín de alerta sísmica difundido por el Instituto Nacional de Geofísica marroquí, el terremoto, de magnitud 7, sacudió la región septentrional marroquí de Marrakech y se produjo a las 23:11 hora local (00:11 GMT del sábado) a 8 kilómetros de profundidad. Tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada 63 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech.
Vecinos de Marrakech explicaron el miedo pasado durante el temblor, que duró varios minutos y dejó dañados edificios y mezquitas de la medina (ciudad antigua). Khalid, residente en la medina, indicó que el minarete de la mezquita de Bab Ailan cayó al suelo a causa del temblor y también resultó dañada la entrada del templo.