Un niño de diez años murió el lunes por la noche en Miami, Florida (EE.UU.), tras dispararse con un arma de fuego en un «supuesto» accidente ocurrido dentro de la vivienda familiar del menor, según informaron este martes las autoridades.
El «trágico accidente» ocurrió alrededor de las 20:00 hora local del lunes (00:00 GMT de este martes) dentro de la vivienda de North Miami, donde acudieron las autoridades policiales al recibir una llamada de emergencia.
En una rueda de prensa, Cherise Gause, jefa de Policía de North Miami, confirmó que el niño, de quien no se ha revelado su identidad, fue trasladado de urgencia a un hospital cercano pero falleció.
El arma con la que supuestamente el menor se disparó está registrada a nombre del padre del niño, cuya identidad tampoco trascendió y quien se encontraba en la vivienda en el momento del suceso.
Gause señaló que la lesión del niño parecía ser «una herida de bala autoinfligida» y que aparentemente fue un accidente.
«Este es un accidente trágico que no queremos que pase nadie en nuestra comunidad. Se trata de algo que ciertamente se puede evitar si practicamos el almacenamiento seguro de las armas de fuego, especialmente cuando hay niños», comentó la jefa policial.
Gause señaló que, por el momento, no se ha realizado detención alguna y tampoco hay cargos pendientes, pero que la oficina del fiscal estatal está investigando lo sucedido.
De acuerdo con la televisión local CBS4, se trata del segundo suceso con arma de fuego que involucra a un menor y reportado «en poco tiempo».
El pasado domingo, detalló citando a la policía del condado Miami-Dade, una niña de tres años sufrió una herida de bala «autoinfligida» en una mano después de recoger un «arma desatendida».
Un familiar de la niña, identificado como Orlando Young, de 23 años, fue arrestado y enfrenta cargos, añadió el citado medio.
En abril pasado, el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, firmó una ley que permite portar un arma de fuego sin necesidad de permiso estatal, una normativa fuertemente criticada por los demócratas.
La ley HB 543 entró en vigor en julio pasado y convirtió a Florida en el vigésimo sexto estado de EE.UU. en promulgar una legislación de este tipo.
El término de «porte constitucional» hace referencia al derecho a llevar un arma de fuego, ya sea de manera discreta o abiertamente, gracias a la Segunda Enmienda de la Constitución, que otorga al pueblo estadounidense el derecho a poseer y portar armas.
Anteriormente, los floridanos no necesitaban permisos para comprar un arma, pero sí para portarlas en público, por lo que esta ley elimina tal requisito.
En Florida, según datos divulgados por la televisión NBC6, casi 3 millones de personas tienen un permiso de armas ocultas.