Así es Bourbon Street, la histórica calle de New Orleans víctima de un atentado terrorista

Vibrante, culta y pintoresca, Nueva Orleans, es la ciudad más importante de Luisiana, mundialmente conocida como la Big Easy por su activa vida nocturna, el pollo frito, entre ellos, el famoso popeyes, la comida condimentada, el carnaval de Mardi Gras y su barrio francés, donde se encuentra Bourbon Street, que fue escenario este miércoles de un atentado terrorista que ha cobrado la vida de al menos 15 personas.

Era la calle ideal para perpetrar un acto criminal de ese tipo, músicos en cada esquina que, con el trombón, el saxofón, la tuba y el clarinete llenan de espíritu festivo a cada visitante. Diario Libre visitó recientemente esta ciudad, cuya comunidad dominicana que ya asciende a más de 6,500, sigue en aumento y se compenetra día a día con las costumbres y cotidianidad del estado.

Bourbon Street es una histórica calle ubicada en el barrio francés de Nueva Orleans que abarca 13 esquinas, y que es famosa por el jazz, sus incontables bares y clubes de strippers recibiendo cerca de 20 millones de turistas al año, según las estadísticas oficiales.

Los edificios que bordean la calle son típicos de la arquitectura colonial francesa, con balcones de hierro forjado y fachadas coloridas. A pesar de su popularidad y su carácter turístico, Bourbon Street también tiene una conexión profunda con la historia musical de Nueva Orleans, siendo el lugar donde el jazz y otros géneros musicales han tenido una gran influencia.

Una vuelta al futuro
El origen de Bourbon Street se remonta a la fundación de Nueva Orleans en 1718, cuando la ciudad fue establecida por los colonos franceses bajo el mando de Jean-Baptiste Le Moyne de Bienville. Originalmente, Bourbon Street fue parte de un plan urbano diseñado por los colonizadores franceses para organizar el Barrio Francés (French Quarter). El nombre de la calle proviene de la Casa Real de Borbón, una dinastía de reyes franceses, en honor a la familia real que gobernaba Francia en esa época.

A lo largo de los siglos, Bourbon Street ha experimentado varias transformaciones, pasando de ser una tranquila vía residencial a convertirse en un centro de actividad comercial y de entretenimiento.

Durante el siglo XIX, Nueva Orleans fue un importante puerto comercial, y Bourbon Street comenzó a atraer una mezcla de comerciantes, inmigrantes, músicos y trabajadores que dieron forma a su identidad cultural única.