Desde que fue descubierta la isla Hispaniola un día 6 de diciembre del año 1492, tanto los países colonizadores, dígase España, Francia, Inglaterra y el imperio norteamericano han querido su control total debido a que la posición geográfica de la isla es excelente para ser de base tanto en la guerra como en el comercio; después de todo estamos en el mismo centro del Caribe.
Los piratas, corsarios y bucaneros la utilizaban como puente de contrabando debido a lo antes mencionado. Por tener el control de la ruta en dónde se comercializaba con oro, azúcar, café, cacao y más, hubo muchas guerras y batallas en tiempos coloniales, pero Dios se encargó de proteger a su isla amada.
Luego de nuestra independencia económica en el año 1821, donde los criollos dominicanos pasan a administrar sus propios recursos. Entra en escena otro país a pelear por el dominio de la isla, Haítí. Hago mención de la palabra (independencia económica) porque en cuanto a cultura, idioma, religión, costumbres y demás, no no hemos independizado de España nuestro país colonizador.
Cómo si fuera una maldición, desde aquella revuelta de esclavos un 1 de enero del año 1804, Haití se convierte en un estado tribal en donde predomina el vudú. Canibalismo, miseria, enfermedades y pobreza no nos han dejado en paz hasta el día de hoy.
Son innumerables las ocasiones que nos han invadido, las cuales gracias a nuestro aliado que es el gran poder de Dios hemos vencido en cada una de las batallas contra ellos, pero nunca han descansado en sus malos propósitos.
Ahora han vuelto otra vez y en esta ocasión, con un ejército de parturientas, religiosos y Ong’s; el objetivo es el mismo: adueñarse de nuestro territorio sí o sí. En esta ocasión, aparte de la comunidad internacional, tienen de aliados a los árabes traicioneros que nos gobiernan.
El presidente árabe que está en el palacio nacional se siente más orgulloso de ser del Líbano que dominicano, dicho por el mismo, y ha quitado nuestro escudo de las estafetas oficiales violando la ley 210-19 de los símbolos patrios.
Funcionarios
Ha puesto la seguridad nacional en manos de una mujer árabe Faride Raful, la cual es también comunista, pro-aborto, pro-lgtb+. Y que fue capaz de escribir un tweet en el año 2012 calificandonos a nosotros los dominicanos de resentidos sociales, racistas y xenófobos, también se opuso a la lectura de la biblia en nuestras escuelas cuando estuvo en el senado. ignorando que la inmensa mayoría de nuestra gente son cristianos.
Por otro lado está Pavel Isa Conde, ministro de economía; ya sabemos cuál es su opinión acerca del pueblo dominicano y tal parece que su misión es destruir la economía y lo está logrando. También hay otros árabes menos conocidos, pero haciendo también su papel de 5ta columna.
Ni hablar de las Ong’s con disfraz de derechos humanos y carita de yo no fui, compran terrenos en nuestro país y construyen casas; traen haitianos ilegales para llevarlos a vivir en esos centros habitacionales, como si nuestro país fuera tierra de nadie, osea están haciendo un país dentro de otro país.
Nosotros los dominicanos tenemos que tener en cuenta que los hijos de Pedro Santana han reencarnado y están en el poder, pero le decimos a esos traidores que los hijos de Duarte, Sánchez y Mella también hemos reencarnado y que la nueva trinitaria se llama La Antigua Orden Dominicana y que le hicimos un juramento sagrado y eterno a nuestros padres fundadores y es que defenderemos lo que por herencia nos pertenece, que se llama República Dominicana.
¡Hasta con la muerte, si fuese necesario!